- Mamá, ¿podemos llevarnos este panito dulce? -decía la niña mientras agarraba un bollo de la estantería del supermercado con su mano pequeña y menuda, con restos evidentes de su última travesura...
- Bueno, agarralo... pero comételo antes de salir.
Ella sonrió a su madre, lo escondió en el doblez lateral de su corte y siguió caminando entre las estanterías buscando un rinconcito donde mordisquear su panito dulce.
- Bueno, agarralo... pero comételo antes de salir.
Ella sonrió a su madre, lo escondió en el doblez lateral de su corte y siguió caminando entre las estanterías buscando un rinconcito donde mordisquear su panito dulce.
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